Santiago Sánchez, empresario familiar leonés, es el nuevo presidente de ANEFA tras la Asamblea General celebrada en Madrid el 4 de mayo. Su llegada al cargo llega tras una dilatada experiencia tanto empresarial como asociativa. Así, es cofundador y administrador de la empresa constructora Contratas y Saneamientos (Coysa); de Áridos Valdearcos y de Reutiliza. Entre sus cargos actuales destacan el de presidente de AFARCYL o el de vocal en la Junta directiva nacional de ANEFHOP.
Empecemos por el principio. ¿Cómo llegaste al mundo de los áridos?
Al mundo de los áridos llegamos por la necesidad de obtener suministro de materias primas para nuestra empresa constructora. En el año 1990 Coysa, nuestra empresa primigenia, fue contratada para realizar una obra de pavimentación de calles en el municipio de Santas Martas. Así conocimos la localidad donde, más tarde, se implantó Áridos Valdearcos. La idea surgió de la necesidad. Al iniciar nuestro trabajo en este municipio confirmamos que la gravera más cercana estaba a 12 km y no tenía capacidad para suministrar áridos para nuestra obra en el tiempo requerido con lo que la obra se nos podía ir complicando. Por otro lado, siempre habíamos tenido en el horizonte la posibilidad de autoabastecernos de áridos, y parecía que había llegado el momento de dar el paso definitivo en esta dirección. Entre mi padre y yo nos pusimos a ello y decidimos contactar con una junta vecinal que disponía de unos terrenos en los que, además, había restos de una antigua gravera, que se había instalado temporalmente para la ejecución de un tramo de la obra de la carretera nacional 601.
La junta vecinal nos comenzó a estudiar la propuesta y, poco a poco, comenzamos con los trámites iniciales para poder instalar una planta móvil que, si bien tenía una productividad modesta, era más que suficiente para nuestro autoabastecimiento. En los años posteriores, se dio la casualidad de que se llevaron a cabo varias obras de envergadura que en la zona como la carretera A231 y la prisión provincial de Mansilla de las Mulas. Como es normal, las empresas adjudicatarias de los contratos de ejecución nos solicitaron presupuesto para sus necesidades de áridos y así, poco a poco, fuimos sumando otros clientes como pequeños constructores de la zona, almacenes de construcción, etc.
¿Por qué piensas que es tan importante el asociacionismo y la labor de ANEFA para las empresas?
Principalmente, porque para la evolución del sector, es necesario contar con una “guía” de confianza en todos los aspectos. Es muy importante que exista un único interlocutor entre las empresas y la Administración que sea capaz de conocer nuestros problemas e inquietudes y trasladárselas a los organismos adecuados y a otros sectores, así como darle el enfoque adecuado para que nuestros intereses prosperen. A esto se añade, además, la necesidad que tenemos todas las empresas de contar con un asesoramiento realmente especializado en todos los ámbitos que afectan nuestra labor: cumplimiento con la normativa medioambiental; seguridad y salud en el trabajo; prevención de riesgos laborales; normativa UNE; ordenación del territorio, etc.
También es muy importante que se marquen objetivos comunes y que se determinen las estrategias para obtenerlos. Podría extenderme mucho más, pero creo que a grandes rasgos estas son las grandes fortalezas del asociacionismo. ANEFA, por su parte, ha demostrado con su trayectoria que cuenta con el capital humano especializado para conseguirlo.
¿Cuáles piensas que son tus principales desafíos al llegar a la presidencia de ANEFA?
Creo que en el punto de mira está el desarrollo y ejecución del Plan Estratégico Áridos 2030. Este documento, ampliamente consensuado, es fundamental para comprender íntegramente el sector en la actualidad y ser capaces de proyectarnos con garantías hacia el futuro. El Plan Estratégico Áridos 2030 es fruto de un esfuerzo de gran calado realizado, precisamente por esas asociaciones de las que hablábamos anteriormente con un fin claro: asegurar un desarrollo sostenible de nuestras empresas.
Además de este importante punto es necesario impulsar, según mi opinión, la difusión del gran valor que aporta ANEFA a la actividad empresarial y sectorial en aquellos territorios en los que aún tenemos margen de mejora sustancial a la hora de sumar nuevos asociados. Si algo tenemos claro es que la unión hace la fuerza y que somos mucho más fuertes cuantos más seamos.
Por otro lado, tengo muy claro que uno de los grandes objetivos es que la asociación siga acompañando, como hasta ahora, a las empresas del sector en todos los ámbitos de nuestro día a día, siendo una pieza fundamental a la hora de potenciar la capacidad de adaptación, la resiliencia y la evolución social y empresarial común.
¿Te ha dado tiempo a considerar cuáles serán tus principales líneas de actuación durante la presidencia de ANEFA?
Sinceramente pienso que debo dar continuidad al trabajo realizado en estos años por mi predecesor y por los presidentes anteriores. Debemos trabajar a fondo en el esfuerzo por introducir a jóvenes pertenecientes a las empresas del sector en la actividad directiva de la asociación para que puedan ir tomando el testigo de forma segura y con todas las garantías, así como conseguir que el número de mujeres presentes en nuestras juntas directivas y comités sea mayor.
Además de tu labor diaria, ¿qué te gusta hacer fuera de la cantera? ¿Quieres compartir con nosotros alguna de tus aficiones?
Me gusta disfrutar de la familia y amigos entorno a una buena mesa, por ejemplo. También practico el senderismo siempre que tengo ocasión y mis responsabilidades me lo permiten. Además, me encanta restaurar muebles, hacer obras domésticas y toda clase de trabajos manuales con madera, piedra, hierro, etc. Si, por otro lado, lo que busco es descansar y desconectar de verdad para mí la única forma de hacerlo al 100% es viajar fuera de mi entorno, actividad que también trato de hacer con cierta frecuencia.