Los datos estadísticos vaticinan una mejoría del consumo de áridos que no acaba de llegar

Cada vez más indicadores van ofreciendo mensajes positivos sobre las perspectivas de consumo de áridos pero la realidad que el tercer cuatrimestre está siendo muy decepcionante en cuanto a consumo real, por lo que se espera que el año cierre con un resultado mejor que le previsto inicialmente, pero todavía negativo, por lo que se marcará un nuevo mínimo histórico.   Fabricantes de áridos de distintas zonas del país señalan un cierto repunte de la actividad pero, al mismo tiempo, otras zonas se mantienen en franco retroceso. Por otro lado, empresas de bienes de equipo y de consumibles (cribas, etc.) señalan crecimientos de entre el 20 y el 30% que obedecen al débil punto de partida inicial y, muy posiblemente a la necesidad de preparar los medios productivos ante un eventual despegue de la demanda en 2015, por motivos electorales.       La licitación pública se incrementa el 65% en los 10 primeros meses del año   Según el último informe sobre licitación pública de SEOPAN, correspondiente a octubre de 2014, en los diez primeros meses del año se ha producido un incremento del 65,0% respecto al mismo periodo de 2013, alcanzándose los 11.389 millones de Euros para el conjunto de Administraciones, distribuidos como sigue: Administración General del Estado un 108,6% (6.551 MEuros), las Comunidades Autónomas un 20,1% (2.366 MEuros) y las Locales un 51,4% (3.362 MEuros).   Los datos interanuales muestran que, comparando la evolución entre noviembre 2013 – octubre 2014 y noviembre 2012- octubre 2013, la licitación de todas las Administraciones ha crecido hasta un total de 13.656 MEuros (74,3%): la Administración General del Estado un 130,1% (6.953 MEuros), las Comunidades Autónomas un 30,1% (2.866 MEuros) y las Locales un 47,0% (3.837 MEuros).   Analizando los datos de los diez primeros meses por tipos de obra, la edificación crece el 65,4%, distribuyéndose de forma irregular, con crecimientos del 71,1% en vivienda pero a unos volúmenes muy bajos (259 MEuros), del 195,1% en resto de edificación (1.031 MEuros) y del 26,2% en equipamiento social (1.486 MEuros). En cuanto a la obra civil que representa el 75,6% del volumen licitado, experimentó un comportamiento positivo del 64,8% en su conjunto, pero se pueden encontrar diferencias sustanciales entre subsectores que crecen fuertemente, como ferrocarriles (239,2%), puertos (94,3%), carreteras (84,4%) y otros con un perfil de crecimiento menos acentuado como medio ambiente (37,8%) o urbanización (26,7%). Las destinadas a obras hidráulicas son las únicas partidas que se ven reducidas (-15,3%).   La distribución territorial muestra decrecimiento en dos Comunidades Autónomas – Aragón (-38,8%) y Castilla y León (-12,9%), un fuerte crecimiento en Castilla – La Mancha (191,1%), Murcia (119,6%), Andalucía (106,9%), País Vasco (98,8%), Extremadura (83,3%), Canarias (56,8%), Galicia (50,0%), Madrid (49,5%), Asturias (47,2%), Cataluña (44,6%) y Cantabria (40,7%), mientras que Navarra (18,1%), Islas Baleares (15,6%), la Comunidad Valenciana (7,1%) y La Rioja (3,0%) experimentan leves mejorías. Las Ciudades Autónomas tienen un comportamiento dispar, ya que mientras Ceuta crece de forma importante (151,9%), Melilla retrocede ligeramente (-3,8%). La licitación no regionalizable crece enormemente (3.369,1%)       El consumo de cemento atenúa su caída pero sigue en mínimos históricos   De acuerdo con los datos facilitados por Oficemen, el consumo de cemento en los diez primeros meses del año ha sido de 9,1 millones de toneladas, lo que representa una caída del 0,5% respecto al mismo periodo de 2013. Este acumulado mantiene las cifras del sector en sus niveles más bajos desde el inicio de la crisis.   Además, a pesar de que en el mes de octubre, el consumo doméstico fue de algo más de 1 millón de toneladas, un 5% más que en octubre de 2013, este porcentaje tampoco ha logrado sacar de los números rojos los valores del año móvil, con una caída de 0,23 millones de toneladas, un 2,2%, menos.       El Informe de coyuntura económica de CEPCO señala un sector de productos de construcción volcado en la exportación   El informe de coyuntura económica de CEPCO revela que los fabricantes de productos de construcción han exportado, en los nueve primeros meses del año, materiales por valor de 14.879 MEuros, cifras similares a las de 2013, con un saldo comercial favorable de 5.171 MEuros. Estas cifras representan el 8,34% de la exportación española.   La pérdida de puestos de trabajo en el sector, desde enero de 2008, alcanza, en el tercer trimestre del año, la cifra de 329.714. La tasa de paro se sitúa en el 22,84%, un 1,8% por debajo de la tasa nacional       Los Presupuestos Generales del Estado para 2015 siguen sin apostar por la inversión   Los Presupuestos Generales del Estado para 2015 siguen sin apostar por la inversión como motor del empleo y el crecimiento económico ya que las inversiones reales de la Administración central, los organismos autónomos y las agencias estatales se sitúan en 4.953,54 millones de euros, un tímido 4,8%% por encima de 2014. De este volumen, el Estado promoverá directamente el 69%, lo que suponen 3.411 millones de euros, un 5% más que en 2014.

La inversión pública del sector público estatal para 2015 asciende a 13.103 millones de euros, cifra superior en un 8,4% a la del presupuesto inicial de 2014. El 38% de la inversión (4.953,54 MEuros) corresponde al sector público administrativo, formado por los agentes que integran los Presupuestos Generales del Estado consolidados, mientras que el sector público empresarial y fundacional aumenta su influencia hasta gestionar el restante 62% (8.149,82 MEuros) de la inversión total.   Estas cantidades muestran un reparto territorial desigual: Excepto la Ciudad Autónoma de Ceuta (-42,5%) y las partidas no regionalizables (-18,0%) y la correspondiente al extranjero (-12,5%), el resto crecen. Galicia (+2, 1%), La Rioja (+3,3%), Canarias (+4,5%), Extremadura (+4,5%), Aragón (+7,6%) y Comunidad de Madrid (+8,2%) son las Comunidades donde menos se incrementa la inversión en construcción, mientras que ésta crece más significativamente en Islas Baleares (+86,3%), la Región de Murcia (+40%),  la Comunidad Foral de Navarra (+33,6%), la Comunidad Valenciana (+26,5%) y Castilla y León (+24,9%), junto con la Ciudad Autónoma de Melilla (24,9%). En valores absolutos destacan Andalucía que recibirá 1.958 MEuros, Castilla y León 1.744 MEuros, Galicia 1.386 MEuros y Cataluña 1.072 MEuros.

   

  La inversión en ferrocarriles pasa de los cerca de 3.661 MEuros registrados en 2014 a los 4.128 MEuros (+12,7%) programados para 2014. Las inversiones en carreteras, puertos, obras hidráulicas, y obras en la costa y medioambientales se incrementan, respectivamente, hasta 2.092 (+3,1%), 867 (+11,2%), 1.585 (+7,9%) y 218 (+31,7%) MEuros, mientras que la partida destinada a los aeropuertos es la única que se reduce a 540 MEuros (-4,1%).   EUROCONSTRUCT constata un mercado reducido a su mínima expresión, pero que finalmente crece   Según el resumen del informe de EUROCONSTRUCT divulgado por ITEC, la economía española detuvo su contracción en 2013 y desde entonces ha venido creciendo a un ritmo discreto cuya continuidad no está exenta de incertidumbres. La construcción ha necesitado un año extra para llegar a una situación análoga. Así, 2014 será el último año en negativo para el sector (-2,4%) tras el cual se abre un período en el que cabe esperar crecimiento, pero igualmente modesto y muy condicionado. Los condicionantes son obvios: la propia debilidad de la demanda por un lado y la saturación de oferta por el otro.   Pese a que se haya previsto un avance del +1,8% para 2015, +3,6% para 2016 y +5% en la primera proyección para 2017, el mercado español de la construcción seguirá produciendo a niveles muy por debajo de las medias europeas, síntoma de que sus problemas son persistentes.

En el contexto de la vivienda, el reajuste de precios ha conseguido prolongar el buen momento del mercado inmobiliario mayorista. Sin embargo, la mejora está tardando mucho a llegar a la compraventa minorista y todavía más al mercado de la construcción propiamente dicho. Durante 2014 la producción residencial ha seguido bajando (-6,5%) pero la novedad es que se ha interrumpido el descenso en los trámites de vivienda de nueva planta, lo cual permite albergar esperanzas para un 2015 finalmente en positivo (+5%). A corto plazo convivirán zonas del país en donde sí se dan las condiciones para reemprender la promoción con otras en donde la crisis se prolonga. Si sólo está justificado producir cuando y donde se produce una demanda inequívoca, es difícil plantear escenarios de crecimiento sustancial, por lo que las previsiones 2016 (+9%) y 2017 (+11%) son tan solo robustas en apariencia.   La situación no es demasiado diferente para la edificación no residencial, donde también contrasta la animación que se percibe en el mercado inmobiliario con la virtual parálisis en términos de producción de nueva planta. El sector no residencial está reaccionando más lentamente que la vivienda, de manera que tendrá que afrontar dos años de contracción (-3,5% en 2014 y -5,5% en 2015) antes de reencontrarse con el crecimiento en 2016 (+2%). Los primeros signos de recuperación están llegando de la construcción industrial, mientras que la edificación para usos terciarios sigue sin generar demanda de nueva planta.   El mercado de la ingeniería civil ya ha tocado fondo y empieza a dar los primeros síntomas de crecimiento en 2014 (+2,6%) con una cierta garantía de que la mejora tendrá continuidad en 2015 (+5,4%). Se trata de un repunte forzado artificialmente por la secuencia de elecciones del 2015 por lo cual existe la posibilidad de que acabe siendo un fenómeno de corta duración. Para que la recuperación se consolide, aparte de no padecer sobresaltos macroeconómicos, habría que contar con más inversión privada, hasta el momento bastante recelosa del mercado español de infraestructuras. Mientras tanto, se proponen unos escenarios de avance del +2,4% en 2016 y +3,5% en 2017, que reflejan la situación de unas administraciones públicas que consiguen ir ampliando su margen para invertir, pero que todavía tendrán que seguir comprometidas a contener sus déficits.